AMAIA FLAMARIQUE OSÉS, Dpto. de Atención a Clientes
-Profesionalmente, ¿cómo ha afectado la pandemia en el desarrollo de tu trabajo?
En mi trabajo ha habido una planificación y organización previa por parte de los dirigentes y jefaturas que me ha permitido desarrollar el trabajo sin que los cambios hayan impactado mucho a la hora de llevarlo a cabo. En mi caso, he podido trabajar desde casa prácticamente igual que como lo venía haciendo desde la oficina: con acceso remoto a mi equipo y desvío de llamadas a casa he podido realizar el trabajo con bastante normalidad. Hemos trabajado mucho, pero estoy muy agradecida a los compañeros que han preparado todo esto y a los usuarios de nuestras entidades que nos han apoyado mucho, han entendido los cambios y se han amoldado a los ritmos que hemos ido marcando.
-Personalmente, ¿cómo lo has vivido?
Personalmente he tenido la suerte de no haber tenido ninguna situación cercana que se haya visto afectada en cuestiones importantes: enfermedad, trabajo…, de familiares y personas allegadas. La preocupación por las abuelas, la conciliación familiar y laboral con hijos en edades escolares…, han sido un poco las principales dificultades.
-¿Con qué te quedas de este año, qué conclusión extraes?
La conclusión que saco es que cada uno hemos vivido esta situación de manera muy diferente en función de cómo nos haya afectado. Para mí, el respeto a las decisiones que pueda tomar cada persona, dentro de lo que esté permitido en cada momento, es una de las mayores virtudes en los momentos que vivimos.
Ha sido un año muy triste y con muchas cosas negativas, pero alguna conclusión positiva también podemos sacar. Hemos frenado un poco el ritmo de vida que llevamos y hemos tenido que prestar especial atención a los mayores, la familia, hemos vuelto a pasear… De todo se aprende.